¿Está en Pájara el árbol de Navidad más alto del mundo? La curiosa competencia con Cazalegas y Vilamarxant

Así luce en Pájara el árbol de Navidad de croché.

Con 25 metros de altura, el árbol navideño de la capital sureña, elaborado en croché en el Centro de Mayores de Pájara, rivaliza con confecciones similares que han lucido otros municipios del territorio nacional, en Cazalegas (Toledo) y Vilamarxant (Valencia)

Estas navidades, la localidad de Pájara luce un maravilloso árbol de navidad de croché, que han confeccionado con mucho esfuerzo e ilusión las personas del Centro de Mayores. Inicialmente, el Ayunta miento anunció que la estructura tendría 22 metros de altura, aspirando al récord mundial, pero días antes de su instalación, la concejala Raquel Acosta confirmó que el árbol alcanzaría los 25 metros.

Sin que exista un certamen oficial, se ha generado una curiosa competencia con otras localidades españolas, que también han promocionado sus árboles elaborados por los vecinos en ganchillo -también llamado croché-, es decir, tejiendo lana en infinidad de formas y colores.

En Toledo, la pequeña localidad de Cazalegas asegura haber alcanzado el récord con un árbol de 26 metros de altura y ocho de diámetro, confeccionado durante meses por más de 100 mujeres del municipio. Según explicó su alcalde, el proyecto ha fomentado la unión intergeneracional y combatido la soledad no deseada entre las participantes, cuya edad oscila entre los 9 y los 85 años. La altura del árbol, según el consistorio toledano, sería certificada ante notario, tras la inauguración de la instalación el pasado 20 de diciembre.

Dando un salto a la Comunidad Valenciana, el Ayuntamiento de Vilamarxant certificó en las navidades pasadas el récord Guinness, con un árbol de 23,5 metros de altura. Elaborado por el Grup Cadeneta, la creación ha sido un símbolo de solidaridad, con todos los beneficios destinados a la asociación local de lucha contra el cáncer.

Arbol de Navidad en Vilamarxant, Valencia (Imagen del Ajuntament de Vilamarxant, en redes sociales).

Pero final, y más allá de la competencia por el récord, los tres proyectos comparten una serie de valores. En Pájara, la instalación causa sensación, y las imágenes que captan los turistas viajan a toda velocidad por las redes, al igual que en Cazalegas y Vilamarxant.

Y los tres árboles coinciden también en que han sido confeccionados por vecinos y vecinas, generando un espíritu comunitario, y regalando a los habitantes de cada localidad y a sus visitantes momentos para recordar.