La retirada de la línea de 66kv será después de la entrada en servicio de la alta tensión, a finales de año

Reunión a tres bandas entre Cabildo, Red Eléctrica, y Gobierno de Canarias.

El Cabildo de Fuerteventura ha informado tras reunirse con Red Eléctrica que el desmantelamiento de la antigua línea de media tensión (66 kV) no llegará hasta la entrada en servicio de la nueva red de 132 kV, lo cual está previsto para finales de este año

El Cabildo de Fuerteventura, tras reunirse con representantes de Red Eléctrica, ha informado de que el desmantelamiento de la antigua línea de media tensión (66 kV), no llegará hasta la entrada en servicio de la nueva línea de alta tensión (132 kV9), lo cual está previsto para finales del presente año de 2024.

La Corporación insular informó este miércoles, 16 de octubre, sobre un encuentro al que asistieron la presidenta insular, Lola García, y la consejera de Ordenación del Territorio, Nereida Calero, por parte del Cabildo. Por parte del ente, estuvieron el director general de Transporte de Red Eléctrica, Ángel Luis Mahou, su director de Infraestructuras en Canarias, Daniel Santiago Pérez, y la delegada de la empresa matriz de Red Eléctrica, Redeia en Canarias, Ainara Irigoyen.

El Gobierno de Canarias estuvo representado por el consejero de Política Territorial, Cohesión Territorial y Aguas del Gobierno de Canarias, Manuel Miranda, aunque no asistió el consejero de Transición Ecológica y titular de Energía, Mariano H. Zapata.

Tras el encuentro, Lola García trasladó que "nada más incorporarnos al grupo de gobierno insular, lo primero que hicimos fue solicitar a Transición Ecológica del Gobierno de Canarias que ordenara la retirada de inmediato de la línea de 66 Kv.", siendo este uno de los requisitos contemplados en la declaración de impacto ambiental del nuevo tendido.

Instalación de la línea de alta tensión en Fuerteventura (Imagen Archivo FD, 2017).

Por este motivo, agregó, "hemos solicitado esta reunión directa con Red Eléctrica para pedirles que procedan con lo establecido". El Cabildo recalcó a los responsables de Red Eléctrica la necesidad de devolver el suelo ocupado por el antiguo tendido eléctrico a su estado natural, con la intención de mantener el espacio en el mejor estado posible y retirar cualquier componente externo que pueda alterar el paisaje majorero".

Por su parte, Red Eléctrica expuso en la reunión que la línea de 132 Kv estará en funcionamiento en su totalidad antes de finalizar el año y que, paralelamente, tramita el proyecto de desmantelamiento de la antigua línea, tal y como adelantó hace un mes Transición Ecológica del Gobierno de Canarias.

Según la institución insular, desde el operador de la red nacional se comprometieron a trabajar de manera coordinada con el Cabildo en el desmantelamiento de la antigua línea, y teniendo en cuenta los criterios medioambientales de cada zona.

La luz al final del túnel de un conflicto entre Endesa, Gobierno y Cabildo que llegó al Supremo

El anuncio se produce tras años de conflicto entre el Cabildo, el Gobierno de Canarias y Red Eléctrica. Desde la instalación de la nueva línea de 132 kV, las instituciones majoreras han reclamado el desmantelamiento de la anterior red, que atraviesa la isla con 102 torretas de gran altura, generando un rechazo social considerable y la activación de las administraciones locales.

En septiembre de 2024, el consejero de Transición Ecológica, Mariano H. Zapata, ya había anunciado que el desmantelamiento de la línea entre Gran Tarajal y Matas Blancas comenzaría tras la puesta en funcionamiento de la nueva infraestructura. Aunque tampoco se ha especificado ahora un cronograma ni para este, ni para los dos tramos restantes.

En la opinión favorable del Gobierno de Canarias, la nueva línea de alta tensión permitirá a Fuerteventura avanzar hacia los objetivos de descarbonización recogidos en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), con la intención de alcanzar un 58% de penetración de renovables para 2030, adelantó entonces el consejero Zapata.

La existencia de una única red de media tensión desde el norte hasta el sur, dijo, “comprometía la seguridad del suministro, especialmente en situaciones de demanda de energía elevada”. La nueva línea, agregó, en su opinión "aportará mayor disponibilidad y seguridad de la red eléctrica de transporte, lo que se traduce en mayor estabilidad, evitando apagones en caso de que uno de los circuitos falle”.

El Cabildo majorero inició contencioso administrativo en 2015 contra el proyecto de Red Eléctrica, y presentó en 2016 requerimiento a la Consejería de Sostenibilidad del Gobierno de Canarias para que anulara de oficio la declaración de impacto ambiental del proyecto entre Mácher y Matas Blancas. 

Aunque el Tribunal Supremo dio la razón a la institución insular en primera instancia -en 2017, dictaminó la paralización cautelar de la instalación-, finalmente la línea de alta tensión quedó desbloqueada con la declaración de utilidad pública solicitada desde REE, y aprobada desde el Gobierno canario.