Transición Ecológica autoriza desmantelar un tramo de la antigua línea de media tensión

Desde que hace una década comenzaran los trámites para la instalación de una línea de alta tensión en Fuerteventura, un proyecto de Red Eléctrica Española, la isla majorera ha reaccionado con una oleada de críticas, protestas y acciones en contra desde las instituciones insulares. La línea de 132 kV salió adelante y se instaló finalmente, coincidiendo en muchos espacios de la geografía insular con la antigua línea. 

La consejería de Transición Ecológica y Energía ha anunciado novedades al respecto, dando luz verde al proceso de desmantelamiento de una parte del tendido eléctrico de la línea norte-sur de 66 kV (Kilovoltios), concretamente, al tramo referido entre Gran Tarajal y Matas Blancas.

Según ha informado la cartera que dirige Mariano H. Zapata, en un comunicado remitido este viernes, 13 de septiembre, los trabajos comenzarán tras la puesta en servicio por parte de Red Eléctrica de España (REE) del nuevo trazado de alta tensión norte-sur de 132 kV entre la subestación Puerto del Rosario y la subestación Gran Tarajal. Dicha acción, explicaron, ha sido autorizada esta misma semana por la dirección general de Energía, culminando así un proyecto de varios años. 

Zapata declaró que "atendemos a un reclamo importante de la isla, yendo de la mano de Red Eléctrica y el Cabildo insular, con el máximo respeto medioambiental, al tiempo que aportamos con la nueva línea mayor seguridad y garantía en el suministro”.

El Cabildo de Fuerteventura, en septiembre de 2023, ya había advertido al Gobierno de Canarias que el desmantelamiento de la línea de 66 Kv "es una medida que debe cumplirse", al haber entrado ya en funcionamiento la nueva línea de 132 Kv en dos de los tres tramos, tal y como contempla, como condicionante, la declaración de impacto ambiental del proyecto de Red Eléctrica.

Al respecto, Zapata explicó en sus últimas declaraciones que de los tres tramos de la línea de alta tensión, se actuaba entre Gran Tarajal y Matas Blancas en primer lugar a petición del Cabildo, al tiempo que anunció que los dos tramos restantes de la antigua línea serán los siguientes, aunque no dio una estimación de fechas. 

Alta tensión en Fuerteventura: una década de conflicto entre Cabildo, Gobierno de Canarias y Red Eléctrica 

Cabildo de Fuerteventura, Gobierno de Canarias y Red Eléctrica, llevan años de batalla administrativa, e incluso judicial. A tenor de la instalación de la línea de alta tensión de norte a sur de la isla, las sucesivas corporaciones insulares han coincidido en rechazar que la instalación de esta red de torretas se llevara a cabo sin la correspondiente evaluación ambiental estratégica.

El proyecto presentado por Red Eléctrica, y aprobado desde el Gobierno de Canarias, se tramitó fraccionando la nueva línea en tramos, facilitando una evaluación ambiental más laxa que el Cabildo siempre ha rechazado, llevando el conflicto hasta el Tribunal Supremo.

El Cabildo majorero inició contencioso administrativo en 2015 contra el proyecto de Red Eléctrica, y presentó en 2016 requerimiento a la Consejería de Sostenibilidad del Gobierno de Canarias para que anulara de oficio la declaración de impacto ambiental del proyecto entre Mácher y Matas Blancas. 

Aunque el Tribunal Supremo dio la razón a la institución insular en primera instancia -en 2017, dictaminó la paralización cautelar de la instalación-, finalmente la línea de alta tensión quedó desbloqueada con la declaración de utilidad pública solicitada desde REE, y aprobada desde el Gobierno canario. 

102 torretas de 50 metros de altura que cruzan Fuerteventura de norte a sur 

Otro colectivo que también ha alzado la voz ha sido la asociación patrimonial El Efequén. En noviembre de 2023, El Efequén recordó que fue el Gobierno de Canarias el que, en el año 2021 aprobó la declaración de utilidad pública de la Línea a 132 Kv entre la subestación de Puerto del Rosario y la subestación de Gran Tarajal, lo que permitió "saltarse legalmente numerosos procedimientos administrativos que pudieran salvaguardar los derechos de las personas y pueblos afectados por la desproporcionada e innecesaria infraestructura".

El colectivo recordó también entonces la oposición general -pública, administrativa y judicial- a esta línea de alta tensión que supone la instalación de 102 enormes torretas (de entre 30 y 50 metros de altura) "cuyo impacto es lamentablemente perceptible".

Desmantelamiento progresivo de la línea de media tensión en Fuerteventura 

Para el consejero de Transición Ecológica, Mariano H. Zapata, el hecho de que el sistema eléctrico de Fuerteventura esté compuesto por una única línea, desde el norte hasta el sur, “comprometía la seguridad del suministro, especialmente en situaciones de demanda de energía elevada”. La nueva línea, indicó, "aportará mayor disponibilidad y seguridad de la red eléctrica de transporte, lo que se traduce en mayor estabilidad, evitando apagones en caso de que uno de los circuitos falle”.

En este sentido, Zapata destacó también que esta inminente acción de desmantelamiento, "a ejecutar en los próximos meses",  “será un proceso que nos permitirá atender al reclamo ampliamente demandado por los majoreros para desmantelar la red antigua”, ya que “es además un requisito indispensable nada más ponerse en funcionamiento el nuevo tendido”.

Zapata afirmó al mismo tiempo que el hecho de contar con una línea de mayor tensión “nos acerca a nuestros objetivos de descarbonización”,  puesto que, argumenta, “para lograr mayor penetración de renovables es fundamental disponer de un mejor y mayor mallado de la red eléctrica, además de interconexiones entre islas e instalaciones de almacenamiento de energía”. Todo ello, dijo, "para alcanzar los objetivos del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) de un 58% penetración de renovables para 2030”. 

También adelantó el consejero que Red Eléctrica deberá incluir un programa de vigilancia ambiental integrado con el de la línea a 132 kV, y apuntó el consejero que serán las tres entidades "de la mano", Red Eléctrica, Cabildo de Fuerteventura y Gobierno, los que desmantelen "los tres tramos que componen esta red”.