Mario de la Cruz, gerente de Asofuer, repasa para Fuerteventura Digital temáticas como el impacto económico del turismo en la isla, la regulación del turismo vacacional, las protestas programadas, o el uso e intercambio de datos personales de los visitantes.
En una entrevista reciente con Janey Castañeyra en los estudios del diario, Mario de la Cruz explicó que el turismo genera 45.000 empleos directos en Fuerteventura, casi la mitad de la población.
También habló sobre las protestas convocadas por las plataformas del 20A, clamando por un modelo de turismo más sostenible. Al respecto, considera que se extrapola la situación de Tenerife a Fuerteventura, donde no sólo no se han construido nuevos hoteles, sino que dice, “hemos perdido camas turísticas en los últimos años”.
Aunque coincide con el sentir general en cuanto a la necesidad de regular el turismo vacacional, y considera que el Gobierno de Canarias va en la buena línea:
“Nosotros lógicamente entendemos que la vivienda vacacional sí, pero con unos estándares de calidad y con un control de la misma. Lo que no puede ser es lo que tenemos en la actualidad. Quien me niegue que tenemos un problema con la vivienda vacacional, o vive en otro mundo, o está ganando mucho dinero”.
“Fuerteventura ha perdido camas que se pueden recuperar”
La patronal turística de Fuerteventura defiende que desde la crisis del 2008, y tras la moratoria turística, el cierre de establecimientos y algunos de ellos que se han reconvertido, el sector hotelero insular ha perdido camas turísticas que no se han recuperado.
“Fuerteventura tenía una capacidad hotelera que no tiene hoy en día”, relata, y en su opinión, no hay que tener miedo por construir nuevos hoteles. Abrir nuevos hoteles sería positivo, defiende y cree que la isla puede incrementar su capacidad hotelera en 5.000 o 10.000 camas.
