Los concejales de los partidos de la oposición en el Ayuntamiento de Tuineje (PP, AMF y NC) han solicitado la convocatoria de un pleno extraordinario para debatir la gestión del actual grupo de gobierno, formado por Coalición Canaria (CC) y PSOE, que lideran respectivamente la alcaldesa, Candelaria Umpiérrez, y la primera teniente de alcalde, Dulce García.
La oposición argumenta que la situación actual del municipio requiere atención inmediata en áreas clave como la seguridad, infraestructuras culturales y deportivas, así como el acondicionamiento de caminos rurales.
Los concejales firmantes son los seis del Partido Popular, Esther Hernández, Nélida Padilla, Abisay Padilla, Juan José Padilla, María del Carmen Marrero y Francisco Artiles; y las dos formaciones que cuentan con un acta, Yurena Vera, de Asambleas Municipales de Fuerteventura, y Pilar Rodríguez, de Nueva Canarias.
Todos ellos han considerado en un comunicado remitido a los medios que "es de máxima urgencia llevar el estado actual del municipio y la gestión del gobierno municipal a debate". La oposición requiere la comparecencia de la alcaldesa, Candelaria Umpiérrez, para que rinda cuentas sobre estas cuestiones, y las medidas a adoptar para darles solución.
El comunicado, que parte del Grupo Popular, encabezado por la exalcaldesa Esther Hernández, plantea que en anteriores sesiones han presentado mociones y preguntas en nombre de los vecinos sin obtener respuesta.
Con el pleno extraordinario solicitado, argumentan, se busca "garantizar que de una vez por todas el grupo de gobierno se ponga a trabajar y adopte las medidas necesarias para solucionar tantos asuntos pendientes y que no pueden esperar más".
Según la Ley de Bases de Régimen Local (Ley 7/1985, de 2 de abril), en lo que concierne a la convocatoria de plenos extraordinarios en corporaciones locales, la oposición está habilitados para convocar plenos extraordinarios, con un máximo de tres al año.
Los convocantes citan el artículo 30 del Reglamento (se entiende, del Ayuntamiento de Tuineje), para recordar que la celebración de pleno extraordinario “no podrá demorarse más de quince días hábiles desde que fuera solicitado". Esto serían tres semanas, de modo que la alcaldesa deberá convocar el pleno, como muy tarde, antes del fin de la primera semana de noviembre.
