Miguel Rastrero, concejal de Vox en el Ayuntamiento de Puerto del Rosario, y único cargo electo por este partido en toda la isla de Fuerteventura, ha anunciado en la mañana de este lunes que abandona la formación, aunque conservará su acta en el pleno capitalino, permaneciendo en el grupo mixto .
En rueda de prensa celebrada en el ayuntamiento, relató que desde el sábado se dio de baja como militante, y cargó contra la dirección de su partido en Canarias, al relatar las desavenencias que los han enfrentado en los últimos tiempos.
Dijo que se debe a los vecinos que lo votaron y a la defensa de Fuerteventura, al contrario que en Vox. Si “yo he venido a trabajar”, declaró, “otros han venido a ganar dinero”, y solo les importan “los votos para seguir en su trono”.
El cierre de la sede sin previo aviso y sin explicaciones, o su rechazo a la explotación de tierras raras en la isla, frente a la postura a favor de su partido, incluso son posibles intereses particulares de por medio, fueron algunos de los argumentos que esgrimió.
Tierras raras asociadas a intereses particulares de Vox
“El tema de las tierras raras marcó un antes y un después, porque tuvimos un pleno aquí en el que se decidió por unanimidad pedir que se frenara las prospecciones de las tierras raras. Yo insistí una y otra vez en mi partido que me dieron una postura, y nadie me la dio”. "Me dijeron de votar en conciencia, y no estoy de acuerdo con esas prospecciones que pueden afectar a la salud de las personas".
Recordó Miguel Rastrero que más tarde que las tierras raras “se convirtieron en la bandera principal de Vox en el Parlamento de Canarias”, insistiendo en que desde sus compañeros en la cámara regional, han defendido su explotación "solo Fuerteventura, no en Canarias, en Fuerteventura”.
“Al principio, no lo entendí”, dijo, para continuar aludiendo a noticias recientes que asocian al portavoz de Vox en la cámara, Nicasio Galván, con posibles intereses particulares en esta industria minera, al tener en su propiedad terrenos rústicos en la isla majorera. Y esto es algo que, dijo Rastrero, “es verdad, porque está en el Portal de Transparencia”.
Aunque matizó que “eso ya sería el colmo", y "yo espero que no tenga nada que ver con intereses particulares”, subrayando que “yo voy a defender a Fuerteventura por encima de todo”.
Cierre de la sede de Vox en Fuerteventura sin previo aviso y “por los votos”
Otro punto que constata las malas relaciones con su partido, y “están los afiliados aquí para decirlo, fue el cierre de la de Fuerteventura sin previo aviso”. “Teníamos una sede con gente comprometida que iba de ocho de la mañana a ocho de la noche, gente noble que no cobraba nada y se dejaba su vida”.
La explicación que le dio el partido fue “que era un local muy caro. Fuimos buscando otros locales, cada vez más baratos. Pero lo que más me dolió, es cuando pido explicaciones, la Dirección Regional hace un comunicado en el que dice que se cierra solamente la sede por cambio de local, y que se abriría nuevamente después del verano.
Sin embargo, al final “me confirman en una reunión, que al presidente provincial realmente no le interesa tener una sede Fuerteventura, porque solo es el 6% de los votos para obtener diputados nacionales”.
Su posición sobre las tierras raras, desveló ahora -“antes no lo había hecho por lealtad”-, significó la apertura de un expediente disciplinario en su contra, al que “presenté 27 folios de alegaciones demostrando que nunca se me trasladó una postura oficial”. Entonces, concluyó:
“Me di cuenta de sus razones: No les importa Fuerteventura, solo los votos para seguir en su trono”
Miguel Rastrero
Una trayectoria constructiva desde Vox: “Yo no he venido a gritar”
Miguel Rastrero hizo un repaso a su trayectoria en Vox, que comenzó hace años, entrando en el partido “ante la deriva que estaba dando el país”, y de la mano de Francisco Sánchez, médico en la isla, de quien explicó, también se ha dado de baja en el partido.
El concejal recordó las miradas al llegar al pleno, porque “Vox siempre ha sido un partido muy estigmatizado”, aunque marcó una diferencia con el discurso de su formación, en el sentido de que “yo no vengo a pegar gritos, a ser radical, o hacer políticas racistas y homófobas. Yo vengo a construir, lo dejé claro desde el principio”.
“La prueba es que, menos una moción de bajada de impuestos, absolutamente todas las que he presentado han sido aprobadas por unanimidad.
“Fuerteventura, Canarias y España necesitan una actitud constructiva, que nos pongamos de acuerdo. A partir de ahí se generan recelos, porque dijo, mientras ninguno de sus compañeros consiguen estos acuerdos, en Fuerteventura sí”.
Miguel Rastrero es titulado en Ingeniería, ha sido piloto del Ejército del Aire, y actualmente es piloto comercial.
